El primer gobernador que se elige después de la toma de posesión presidencial es el de Baja California. Siempre ha existido la expectativa de descifrar si el nuevo presidente tratará de iniciar su gobierno con el triunfo emblemático de un gobernador de su partido. Como sabemos, Baja California es la entidad más longeva en la continuidad de gobernadores panistas. Este año se cumplen tres décadas desde que en 1989 triunfó el candidato del blanquiazul, Ernesto Ruffo Appel. Desde entonces han desfilado cinco gobernadores más para completar 30 años sin alternancia. Se trata de una verdadera paradoja: en la entidad donde ganó y se reconoció el triunfo de un candidato a la gubernatura de un partido distinto al Revolucionario Institucional, la alternancia se detuvo. Se trata de una de las dos entidades (Guanajuato es la otra) donde se ha dado este fenómeno. Ambas son gobernadas por el PAN.
Resulta muy interesante echar un vistazo a la distribución del poder estatal. (Las cifras que se utilizan fueron tomadas del trabajo “AMLO y los gobernadores”, publicado por Frontera el 21 de diciembre de 2018, p. 30). El PRI y el PAN gobiernan 12 entidades cada uno, mientras que MORENA, merced a la elección del pasado 1 de julio, lo hace en cinco estados. Movimiento Ciudadano, PRD y 1 independiente, lo hacen en un estado cada uno. Como vemos el binomio PRI- PAN gobierna sobre el mayor número de ciudadanos en el país (42 millones 499 mil 715 y 32 millones, 934 mil 084, respectivamente). Posiblemente desde los gobiernos de los estados se pudiera generar una mayor resistencia hacia el programa de gobierno de Andrés Manuel López Obrador. Sobre todo considerando que el mapa politico se mantendrá relativamente estable hasta el 2021, es decir, durante todo el primer trienio de la nueva administración.
Como lo señalé este año se renueva la gubernatura panista de Baja California y se agrega la de Puebla. En este ultimo caso por la muerte de la gobernadora Martha Érika Alonso apenas 10 días después de asumido el cargo. Este trágico suceso obliga a una próxima elección extraordinaria. Sin embargo, durante 2020 no se tienen programados comicios para una renovación de algún otro Poder Ejecutivo estatal.
Durante el sexenio encabezado por López Obrador el año de mayor renovación de gubernaturas será en 2021 con 13. Un año después, en 2022 tocará el turno a 6 y en 2023 otras 3. Eso abre la posibilidad para que los candidatos de MORENA y sus aliados obtengan la mayoría de las gubernaturas del país a la mitad del sexenio. Ello depende en mucho de los resultados que muestre la administración encabezada por AMLO.
Todo indica que los liderazgos opositores desde las entidades serán los de Javier Corral, gobernador de Chihuahua y que será suplido hacia finales de 2021 y Enrique Alfaro, quien llegó al gobierno de Jalisco como candidato de Movimiento Ciudadano apenas en 2018. En el caso de Corral ha convocado a algunos de los comentócratas anti AMLO más influyentes y que ven en él a un buen candidato para la sucesión presidencial de 2024. En el caso de Enrique Alfaro Ramírez, ex alcalde de Guadalajara y de Tlajomulco de Zúñiga, no oculta tampoco sus aspiraciones presidenciales, pero para serlo tendría que renunciar a su cargo antes de concluir su mandato al frente de Jalisco.
En las 5 entidades donde gobierna MORENA, vive una cifra importante de mexicanos: 26 millones 548 mil 149. Se trata de entidades grandes y con gran cantidad de población. Tanto Veracruz como la Ciudad de México, concentran a buena parte del listado nominal nacional. Es posible que Claudia Sheinbaum se convierta también en un buen prospecto para suceder a AMLO. Es muy temprano, pero la Ciudad de México es el gran escaparate para proyectar a un candidato presidencial, como fue el caso del mismo AMLO.
Con partidos politicos débiles o en crisis como se encuentran el PRI, PAN o PRD, algunos gobernadores podrían ser el eje en torno al cual se aglutine una oposición importante al gobierno de AMLO. Uno en el Norte y el otro en Occidente intentarán aprovechar sus cargos para proyectar una oposición, primero, y una candidatura presidencial después. Aunque si los ciudadanos evalúan como un buen gobierno el de AMLO, su cometido será muy complicado. Eso lo veremos.
Dr. Víctor Alejandro Espinoza
El Colegio de la Frontera Norte