A mediados de mayo de 2019, en San Luis Rio Colorado, Sonora, se reportó la desaparición de Itzel: una niña de siete años de edad. De inmediato se generó una Alerta Amber. Desafortunadamente, una semana después fue encontrada sin vida y semienterrada, muy cerca de donde fue vista por última vez. La Fiscalía General de Justicia en el Estado calificó el hecho como feminicidio.[1] Casos como el de Itzel son uno de tantos que desde hace años prevalecen en la entidad. No en balde, también en el 2019 la Comisión Nacional de Derechos Humanos afirmó que Sonora formaba parte de los cinco estados con las tasas más altas de menores de 18 años de edad desaparecidos en México.
Por supuesto, en contextos como Sonora no hay que descartar que el fenómeno puede estar relacionado con actividades de grupos criminales. No es un secreto que, en esta entidad, algunas niñas y adolescentes han sido secuestradas, abusadas sexualmente y asesinadas por delincuentes;[2] tampoco que niñas y niños han sido víctimas de trata, como sucedió en el año 2015, cuando fue descubierta una red criminal de compra-venta en la que estaban involucradas algunas autoridades.[3]
El panorama de los últimos años no es alentador. Una base de datos creada a partir de los desplegados de Alerta Amber Sonora, de febrero de 2015 a abril de 2021, reveló que desaparecieron 111 menores de edad, de los cuales 28% no fueron localizados, 71% fueron localizados vivos y un 1% fue localizado muerto. Desaparecieron más niñas (62%) que niños (38%), específicamente niñas que eran adolescentes (81.2%), pues oscilaban entre los 10 y 18 años de edad; y más niños menores de 14 años (80.9%). En parte esto no sorprende, pues los datos oficiales muestran la misma tendencia de desapariciones por sexo y rango de edad desde los años sesenta.
Lo que llama la atención es que el 2016 fue el año durante el cual se registraron más desapariciones (27.9%), después decrecieron y en el 2019 nuevamente se incrementaron (14.4%). Estos años pico coinciden, por un lado, con la transición de gobierno en Sonora (en el 2016, del mandato de Guillermo Padrés, del Partido Acción Nacional (PAN), al de Claudia Pavlovich, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), y por otro, con un año de violencia criminal álgida (en el 2019, el asesinato de la familia LeBaron, por ejemplo) que se ha extendido hasta la fecha debido a “la disputa entre grupos criminales por las diferentes plazas y rutas de tráfico ilegal en el estado”, como afirma el politólogo Andrés Sumano.[4]
Más allá de lo anterior, la información derivada de la base de datos también revela otros aspectos de la desaparición de menores de edad en Sonora, que poco o nada se han hecho públicos. Por ejemplo, que el 45% de los casos se reportaron en los meses de febrero, abril, julio y septiembre. A priori esto no dice nada hasta que la información es vista desde una perspectiva menos sociológica y más antropológica que infiere el posible vínculo de las desapariciones con periodos culturales o con periodos de producción en la entidad.
En el primer caso se trata de los meses cuando se celebran fiestas comerciales (como en febrero), cívicas (como en septiembre) o bien días de asueto familiar (como vacaciones de semana santa en abril o de verano en julio), periodos cuando los menores de edad se desplazan más, ya sea solos o en familia, y también son más vulnerables ante la posible comisión de un delito, o bien al extravío. En el segundo caso se trata de los meses (entre marzo y agosto) cuando arriban miles de familias migrantes que laboran como jornaleras en campos de cultivo en Sonora, quienes suelen ser víctimas tanto de violencia laboral como criminal.[5]
Otro aspecto que destaca del análisis de la base de datos es la geografía de las desapariciones. Al respecto, Hermosillo es el municipio que concentra la mayoría de las desapariciones: un 34.2%. Le sigue Cajeme con 16.2%. Y finalmente Nogales con 13.5%. En otras palabras: solamente tres municipios de la entidad concentran el 63.9% de las desapariciones de menores de edad. Llama la atención, además, que estos municipios se encuentran geolocalizados en puntos estratégicos de Sonora: el sur, el centro y la frontera con Estados Unidos. Parece tratarse de un continuum o corredor geográfico de las desapariciones, que casualmente es el mismo usado por grupos criminales.
Finalmente, hay algo más que se hace visible en la base de datos: la fenotipología de los menores de edad desaparecidos, en particular sus rasgos físicos (más no conductuales) dado que la información derivada de la Alerta Amber comparte dos variables importantes: complexión y tez de los menores. En cuanto a la primera, destaca que desaparecen más menores de edad que son delgados (58.5%), les siguen aquellos de complexión regular (32.4%) y finalmente los que son robustos. Respecto a la tez o color de la piel, desaparecen más menores de tez morena-clara (52.2%), les siguen los de tez blanca (26.1%) y finalmente los de tez morena (19.8%).
La radiografía presentada permite comprender un poco más la desaparición de menores de edad en Sonora, así como delinear algunas medidas de prevención familiares y comunitarias. Desafortunadamente, el tema ha pasado por alto en los diagnósticos y políticas de seguridad de la nueva administración estatal.[6] Mientras tanto, el asesinato de niñas como Itzel seguirá impune en la entidad, al igual que el de madres buscadoras de desaparecidos.[7]
Dr. Óscar Misael Hernández-Hernández
El Colegio de la Frontera Norte
[1] Reporte Índigo (31/05/2019). Hallan muerta a Itzel, la niña de 7 años reportada como desaparecida en Sonora. Recuperado de: https://www.reporteindigo.com/reporte/hallan-muerta-a-itzel-la-nina-de-7-anos-reportada-como-desaparecida-en-sonora/
[2] Infobae (29/03/2021). La brutal confesión de un presunto sicario del grupo de Caro Quintero: qué hacen con mujeres y niñas en Guaymas. Infobae. https://www.infobae.com/america/mexico/2021/03/30/la-brutal-confesion-de-un-presunto-sicario-del-grupo-de-caro-quintero-que-hacen-con-mujeres-y-ninas-en-guaymas/
[3] El Universal (16/09/2015). Consignan a 16 por compra-venta de niños en DIF Sonora. Noroeste. https://www.noroeste.com.mx/nacional/consignan-a-16-por-compra-venta-de-ninos-en-dif-sonora-CANO981939
[4] Sumano Rodríguez, José Andrés (26/07/2021). Crimen organizado y violencia en Sonora. Recuperado de https://seguridad.nexos.com.mx/crimen-organizado-y-violencia-en-sonora/
[5] Sandoval, Francisco (23/02/2021). Jornaleras de Sonora sufren por el crimen organizado. Recuperado de https://www.expreso.com.mx/seccion/sonora/291887-jornaleras-de-sonora-sufren-por-el-crimen-organizado-en-el-estado.html
[6] Plan Estatal de Desarrollo. Sonora 2021-2027, pp. 100-105.
[7] Infobae (16(07/2021). Asesinaron a Aranza Ramos, integrante de Madres Buscadoras de Sonora. Recuperado de https://www.infobae.com/america/mexico/2021/07/16/asesinaron-a-aranza-ramos-integrante-de-madres-buscadoras-en-sonora/
