Décima Cumbre y América del Norte y sus retos

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Opinión de José María Ramos García Investigador de El Colegio de la Frontera Norte

jueves 12 de enero de 2023

Por primera vez en la administración del presidente López Obrador el presidente Joseph Biden y el primer ministro Justin Trudeau visitan México para la Décima Cumbre de Líderes de América del Norte y para sostener encuentros bilaterales.

La Cumbre pretende promover la cooperación entre los países de América del Norte con la finalidad de generar economías más competitivas con base de cadenas de suministro más resilientes; al igual gestionar un mejor cambio climático, atender una agenda de pos pandemia del COVID-19 y hacer frente a  las organizaciones delictivas transnacionales que trafican y contrabandean personas y drogas ilícitas como el fentanilo. 

Uno de los retos principales de la Cumbre en el marco de los 29 años de las iniciativas de integración comercial es disminuir las asimetrías en la región y en especial promover un mayor impacto social con el país de menor desarrollo. Prueba de ello es la propuesta mexicana de que Estados Unidos canalice mayores recursos para el fomento del desarrollo, en el marco de lo que fue la Alianza para el Progreso (1961 y 1970), bajo el presidente John F. Kennedy.

Otro aspecto a destacar es que los gobiernos dejaron de lado en la Declaración conjunta los temas críticos de la coyuntura de la relación, en especial las nuevas políticas del Estado mexicano en materia de generación de energía y con respecto a la suspensión de las importaciones de maíz transgénico de Estados Unidos a partir del año de 2024. Prevaleció la definición de una agenda para el presente y futuro inmediato en especial en materia de promover la competitividad con base de los semiconductores

Los acuerdos principales son: 

Organizarán el primer foro trilateral sobre semiconductores, con objeto de adaptar las políticas y aumentar la inversión en las cadenas de suministro de semiconductores de América del Norte. Igualmente se coordinarán las iniciativas de mapeo de las cadenas de suministro de semiconductores, con lo cual se identificarán oportunidades de inversión complementarias. Se ampliarán el mapeo de los recursos minerales críticos de América del Norte, por ejemplo el litio, a fin de recopilar detalles sobre los recursos y las reservas. 

En este contexto se ubica la propuesta del Plan Sonora, para la exploración del litio, con base del desarrollo de energías limpias y la construcción de plantas solares. El Plan integrará una agenda ambiental, automotriz y de energía, que es parte del presente y futuro inmediato para promover la competitividad, el bienestar y las energías limpias.

Los tres países promoverán economías basadas en energías limpias y responder a la crisis climática. En la cual se comprometieron a combatir la crisis climática mediante:

El compromiso de reducir las emisiones de metano del sector de desechos sólidos en al menos un 15% para 2030 y generar políticas de medición y mitigación de las emisiones de metano procedentes de los desechos y la agricultura, incluido el logro del compromiso mundial en materia de metano a través de la cooperación trilateral en materia de emisiones de metano y carbón negro (Casa Blanca, 2023).

La elaboración de un Plan de Acción para la Reducción de la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos para finales de 2025 y la descripción de las iniciativas dirigidas a reducir la pérdida y el desperdicio de alimentos a la mitad para 2030.

El intercambio de información sobre las prácticas óptimas para electrificar y descarbonizar los autobuses públicos. El desarrollo de un plan para las normas operativas y la instalación de cargadores para vehículos eléctricos a lo largo de las fronteras de los tres países.

Además, el compromiso de una cooperación trilateral para conservar el 30 % de la superficie terrestre y oceánica del mundo para 2030 y de avanzar en la conservación liderada por los pueblos indígenas. Finalmente, el establecimiento de un mercado de hidrógeno en América del Norte, incluida la posible cooperación en materia de investigación y desarrollo, códigos y normas de seguridad, grupos transfronterizos de hidrógeno, corredores de carga verdes y operaciones marítimas integradas (Casa Blanca, ibídem). 

Estas iniciativas en materia de gestión del cambio climático son importantes y son una continuidad de las propuestas del Diálogo Económico de Alto Nivel. El desafío para México es que se integren como parte de su agenda pública y que cuenten con los recursos presupuestarios para incentivar una eficaz gobernanza del cambio climático. 

En el marco del seguimiento de la Declaración de Los Ángeles sobre Migración y Protección, los dirigentes reafirmaron su compromiso de trabajar juntos para lograr una migración segura, ordenada y humana en la región.

Se implementará el Plan de Acción Trilateral para la Ampliación de las Alianzas para el Desarrollo con medidas prácticas para mejorar la coordinación y abordar las causas de la migración irregular. Se creará una plataforma virtual a través del sitio web de la Declaración de Los Ángeles con objeto de simplificar el acceso de los migrantes a las vías legales. Con ello se pretende apoyar a los migrantes para acceder a las vías legales en persona.

Se promoverá el intercambio de información y las prácticas óptimas en el Programa de Trabajadores Agrícolas de Temporada, una iniciativa binacional para mejorar los derechos laborales. En general estas iniciativas no atienden la problemática estructural de oferta y demanda de la movilidad laboral irregular, son paliativos con respecto a promover una eficaz cooperación regional de los países expulsores de migrantes.

Una política importante es el intercambio de las prácticas óptimas para aumentar la rapidez, la eficiencia y la equidad de los sistemas de procesamiento de solicitudes de asilo, con la finalidad de que las personas elegibles reciban ayuda o protección de inmediato y que los migrantes con solicitudes de protección no meritorias sean retirados con celeridad.

Estas políticas se orientan de manera particular hacia los países de Cuba, Nicaragua, Venezuela y Haití, que concentran cerca del 55% de las deportaciones del gobierno estadounidense en los últimos cuatro meses. 
La creciente e histórica movilidad laboral irregular es una preocupación del gobierno estadounidense por sus implicaciones políticas y electorales.

El problema migratorio es parte de la agenda de política del gobernador de Texas Greg Abbott quien está en abierta confrontación con el gobierno federal estadounidense. Se puede afirmar que en la coyuntura política es más importante para el gobierno del presidente Biden una mejor gestión migratoria que de las drogas.

Los tres países se comprometieron a coordinar acciones y estrategias para combatir el tráfico de armas y drogas, así como la trata de personas. Dicho compromiso incluye: Reanudar el diálogo sobre la Estrategia de América del Norte para Combatir la Trata de Personas a fin de mejorar la cooperación contra la trata laboral y sexual en la región.

Continuar la colaboración dentro del Diálogo de América del Norte sobre Política de Drogas (NADD) con la finalidad de gestionar las amenazas de las drogas ilegales y fortalecer los enfoques del uso de sustancias centrados en la salud pública. Dicha colaboración incluye un mayor intercambio de información sobre los productos químicos utilizados en la fabricación ilícita de fentanilo y otras drogas sintéticas.

Igualmente se aumentará la colaboración trilateral para promover la seguridad nuclear en América del Norte e incrementar el compromiso trilateral para intercambiar información sobre las mejores prácticas de ciberseguridad. 

Estas iniciativas dejan de lado el problema estructural del alto consumo de drogas sintéticas y químicas de la sociedad estadounidense, que ha aumentado de manera importante, a pesar del cambio de enfoque a salud pública del gobierno estadounidense. Al igual que el problema de la creciente oferta de drogas.

En donde los avances en la reducción de la violencia, tráfico de armas y lavado de dinero son escasos, de ahí la creación del Acuerdo Bicentenario suscrito el año pasado. También nos indican el deficiente rol de la DEA en México en reducir el tráfico de drogas hacia Estados Unidos desde el año de 1985. 

Si bien el gobierno estadounidense cambió su enfoque desde el 2021 priorizando la reducción del alto consumo de drogas, los logros han sido escasos. Con lo cual en lo general se mantiene la política de control e intercepción de drogas en la frontera con México. Con aumentos relevantes en los últimos cuatro años. 

En materia de salud se reiteró la importancia de intercambiar información y a establecer políticas públicas para proteger a sus países contra las crisis de salud actual y futura. Dicho compromiso incluye: Revisar el Plan de América del Norte para la Gripe Animal y Pandémica. También se propuso promover sociedades diversas, inclusivas, equitativas y democráticas que combatan el racismo.

Colaborar a través de organizaciones regionales y multilaterales para promover la equidad y la justicia. Combatir la violencia contra las mujeres y niñas indígenas, combatir la violencia contra las personas LGBTQI+, en particular mediante la ampliación del número de miembros de la Coalición por la Igualdad de Derechos en las Américas y el Grupo Central LGBTQI+ de las Naciones Unidas y finalmente integrar a México a la Alianza global para la acción contra el acoso y el abuso por Internet por motivos de género. 

Estas medidas son importantes en especial para México considerando los mayores niveles de vulnerabilidad de distintos grupos colectivos que han sido excluidos. El desafío es que sean prioridad en la agenda gubernamental y que se gestionen de manera eficaz los recursos previstos en la Declaración. En la coyuntura actual el gobierno del presidente López Obrador pretende superar la asimetría con una política de defensa de la soberanía en materia de seguridad energética y seguridad nacional. 

El reto estadounidense es entender un cambio en las prioridades de la agenda mexicana. Sobre la base de que se puede plantear una interdependencia asimétrica  con respecto a principios básicos de soberanía, interés nacional e impacto social, que permitirían promover tanto un proceso de integración comercial, pero también un mayor bienestar en la sociedad mexicana y con ello disminuir las desigualdades sociales. 

El desafío es gestionar la interdependencia asimétrica según los problemas compartidos  y acorde las prioridades de crecimiento y desarrollo de cada país y sus impactos en los procesos de integración comercial y económica en América del Norte.

La Cumbre de Líderes de América del Norte se ha caracterizado por una mayor complejidad  de la agenda trilateral, en especial por el aumento de drogas ilícitas, una movilidad laboral irregular sin precedentes en la historia de la frontera mexicano-estadounidense, los impactos del cambio climático  y un incremento en la dinámica comercial y con demandas entre los tres países en el marco del T-MEC.

Dr. José María Ramos García

El Colegio de la Frontera Norte