Corredor Fronterizo: ¿Qué necesita renegociar México con el TLCAN?

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Opinión de Belem Vázquez Galán Profesora-Investigadora de El Colegio de la Frontera Norte

lunes 13 de febrero de 2017

En el documento del TLCAN se establece que cualquiera de los tres países puede retirarse del acuerdo seis meses después de haber notificado por escrito a las otras partes su intención de hacerlo. Hasta ahora EUA no ha hecho ninguna notificación, pero de llevarlo a cabo, México tendría por lo menos seis meses para preparar una estrategia que le permitiera enfrentar la desaparición del esquema arancelario actual. En caso de renegociar los términos en que actualmente se encuentra el acuerdo, México necesita defender los productos con mayor valor de exportación pero con bajos márgenes de ganancia. Lo peor que puede suceder, es que se inicie una guerra de tarifas entre México y EUA dada la gran dependencia de su comercio internacional.

La ignorancia de Donald Trump y de sus seguidores sobre el funcionamiento del libre comercio es preocupante ya que a pesar de que la pérdida para el país será mayor que la ganancia, continúan promoviendo la idea de imponer aranceles a las importaciones, no solo de México sino de otros países como China. La aplicación de un impuesto a la importación se transfiere a los precios que pagan los consumidores finales, ya que ni el exportador mexicano ni el importador estadounidense están obligados a asumir ese costo. Generalmente cuando se aplican medidas de protección comercial, lo que en realidad hace el gobierno no es proteger a los trabajadores o consumidores, sino proteger a los productores nacionales que no pueden competir con el extranjero y, que ante la incapacidad de ofrecer precios bajos pierden participación en el mercado nacional.

La aplicación de aranceles a productos mexicanos sí va a generar ganadores, por un lado, el gobierno de Estados Unidos que podrá aumentar sus ingresos por concepto de impuestos (que pagaran sus ciudadanos) y por el otro, los productores al aumentar su participación en el mercado ya que el diferencial de precios se reduce. Sin embargo, la perdida que experimenta el consumidor en general será mucho mayor que la ganancia del gobierno y de los productores nacionales. Cada empleo generado por esta medida proteccionista sería financiado por la perdida en el superávit de miles de consumidores.

Por otra parte, México se enfrenta a dos situaciones y es por ello que debe renegociar de manera cuidadosa. Por un lado, los productos mexicanos con alta demanda en EUA y que independientemente de la aplicación de aranceles mantengan precios competitivos, no verán reducidos significativamente sus montos de exportación. Sobre todo con un tipo de cambio que siga abaratando los precios. Algunos ejemplos de productos con bajo riesgo de perder mercado, son las autopartes, los camiones para transporte y las computadoras. El arancel que tendría que imponer Trump tendría que ser muy alto para eliminar todo incentivo de comercio. Sin embargo, existen muchos productos que tienen menor ventaja en cuanto a precios y que además tienen como su principal destino los Estados Unidos. Estas, están en riesgo de perder, ya que se verán forzados a absorber parte del aumento del precio para seguir compitiendo en el mercado. Ejemplos son los receptores de TV, algunos textiles y los autos de pasajeros, principal producto de exportación. A corto plazo, México debe renegociar de tal forma que los productos con mayor dependencia del mercado de EUA y que además tienen menor margen de ganancia se les apliquen aranceles bajos. En el largo plazo, México debe diversificar sus mercados para reducir la dependencia en un solo país, ya este caso muestra la situación de vulnerabilidad en que se encuentra.


Dra. Belem Vásquez Galán, Profesora Investigadora
El Colegio de la Frontera Norte Monterrey