Corredor Fronterizo: El temido muro

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Opinión de María del Carmen Portillo Téllez Profesora-Investigadora de El Colegio de la Frontera Norte

lunes 16 de enero de 2017

Desde que se mencionó el lanzamiento del empresario Donald Trump, por el primer trimestre del pasado 2016, hubo encabezados tales como “Trump y su tragicómica candidatura a la Casa Blanca”. Los principales temas que se han venido escuchando en noticieros, publicados en diarios y redes sociales son acerca de la inmigración y la seguridad fronteriza.

El eslogan de la campaña ha sido Make America Great Again (Hagamos de Estados Unidos un gran país de nuevo). Una de las grandes promesas de campaña fue construir un muro a todo lo largo de la frontera sur de Estados Unidos con la frontera norte de México, con una longitud aproximada de 3,144 km, abarcando California, Arizona, Nuevo México y Texas.

Abordaré el tema de el temido muro, el cual Trump, ahora siendo presidente electo de Estados Unidos, reitera que lo empezará a construir. Con este temido muro vienen muchos problemas, yo diría que le veo más problemas que ventajas, el que más ha sido de mi interés es el de la inseguridad ecológica, para ejemplificar mencionaré algunas publicaciones que han llamado mi atención.

Comenzaré por la publicación del 10 de mayo por Alejandra Vargas Morera, quien ha tenido múltiples premios por su trabajo periodísticos científico y ambiental, nos dice que el muro tendría un impacto potencial en 111 especies de animales y plantas en peligro de extinción, podría afectar a unos 13 hábitats naturales que son hogar de especies como los jaguares de los que solo se tiene registro de un espécimen. Otra notificación de la gaceta UNAM del pasado septiembre, donde el Dr. Gerardo Ceballos del Instituto de Ecología, UNAM, hablaba de los efectos del muro. En dicha nota él explicaba que por el muro fronterizo serían afectadas más de 800 especies de vertebrados, principalmente mamíferos, reptiles y anfibios; además se violarán acuerdos internacionales ambientales.

El impacto ambiental al que se refirió tiene que ver con el movimiento de especies con poblaciones entre ambos países, para las que el muro se convierte en una barrera infranqueable.

En mismo septiembre de 2016 en la página Animal Político de la BBC, vi un encabezado que decía: “Desde el correcaminos hasta el cactus saguaro: las especies que sufrirían con el muro de Trump”, eso me llevó a pensar en la caricatura donde el coyote quería atrapar a un correcaminos, ésta fue creada en 1949 por Chuck Jones (1912-2002), empleado de los estudios Warner Bros.

Con esto imagino, como en las caricaturas, a los animales que hablan y van a formar una fila para obtener su visa, pues ellos tienen que aparearse y hacer intercambio genético para que su especie pueda seguir adelante, pero esto solo ocurre en las caricaturas. Los animales no razonan como nosotros los humanos y no pueden de pronto tener el conocimiento de buscar nuevas rutas, trabajar para tener dinero y tomar la vía marítima o aérea porque de pronto se encuentran con un “muro”, tal vez pasados muchos años se logre ver quiénes sí sobrevivirán y quiénes se extinguirán.

¿Llegaremos a esos extremos? Espero que se tomen las medidas y razonamientos pertinentes antes de llegar a esa acción, pues si no estaríamos retrocediendo a la época 200 años antes de Cristo, cuando se construyó la Muralla China.

Actualmente existe una tecnología avanzada, que nos permite inferir lo que pasará en términos ecológicos. Dejemos seguir el curso de la naturaleza sin tener que echar mano de “muros”; todos los habitantes que conformamos este planeta somos importantes, no hay que atacar y menos a quien no se puede defender como son los seres de la naturaleza que nos acompañan, conozcamos y rectifiquemos.

Dra. María del Carmen Portillo Téllez
Profesora-Investigadora Cátedra Conacyt, DEP.