Opinión de Blanca García Profesora- Investigadora de El Colegio de la Frontera Norte de El Colegio de la Frontera Norte

jueves 17 de octubre de 2013

El viernes 19 de abril a las cinco de la mañana, el Senado de la República aprobó las reformas a la Ley Federal de Telecomunicaciones (LFC) en la que se incluye la regulación de radiodifusoras comunitarias e indígenas y el reconocimiento de los derechos de las audiencias (http://mexicanadecomunicacion.com.mx/rmc/2013/04/23/ley-federal-de-telec…).

Sin embargo, la regulación y legislación del sector de telecomunicaciones en México es uno de los grandes retos pendientes ahora asumido por los integrantes del Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel), en sustitución de la Cofetel.

El Ifetel tiene el reto de generar en los próximos 180 días los primeros cambios de carácter urgente que nivelen la competencia y mercado en el sector de las telecomunicaciones (http://siteresources.worldbank.org/INTMEXICOINSPANISH/Resources/noll-pap…, http://www.celularis.com/opinion/retos-ifetel-mexico/).

Se observa que entre los retos que deberá enfrentar el organismo de reciente creación, y que va de la mano con la transición digital, es regular la llamada Nueva Televisión.

Esta iniciativa vislumbra promover el impulso a nuevos servicios para los consumidores, nuevas formas de interactuar con los usuarios finales, y también la entrada a nuevos competidores, por lo que nos encontramos frente a la dimensión tecno-social de la transición digital (http://www.jornada.unam.mx/2013/08/03/opinion/018a1pol).

Para algunos observadores, el apagón analógico, que provoca la inmediata diversificación de canales de televisión, es una oportunidad histórica para, eventualmente, democratizar la televisión mexicana, sin que repitamos los patrones actuales de visualización mediática, a condición de saber cómo ejercer nuestro derecho de audiencia.

Luego de dos intentos fallidos, la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) logró concretar el apagón analógico en la ciudad de Tijuana, la primera en México y América Latina en contar con el servicio digital de televisión abierta. Ello no exentó de inconformidades e inversiones fuera del presupuesto original (http://www.proceso.com.mx/?p=347747).

A raíz de esta primera experiencia se postergó seis meses el despegue del segundo programa piloto y la conclusión de las señales analógicas en las ciudades fronterizas de Monterrey, Ciudad Juárez, Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros, recorriendo las fechas del 26 de noviembre de 2013 al 29 de mayo de 2014, en tanto que en el caso de Mexicali, se completará hasta el 26 de noviembre de 2014.

Con ello, la transición digital a escala nacional está planeada para noviembre de 2015. Mientras, en cinco ciudades fronterizas tenemos los próximos 180 días (los mismos que Ifetel) para identificar y ejercer nuestro derecho de audiencia. ¿Asumiremos el reto?