Tijuana, B.C., a 3 de abril de 2018.- El Seminario Permanente sobre Migración Internacional (SEPMIG), busca ser un espacio de discusión y difusión de investigación académica sobre los diferentes fenómenos migratorios alrededor del mundo.
En su primera sesión del 2018, realizada en El Colegio de la Frontera Norte (El Colef), inició el ciclo “Identidades en movimiento: género, etnia y generación” con la presentación “La vida después de la deportación: la experiencia del retorno de migrantes indígenas ecuatorianos en clave de género” a cargo de la Dr. Gioconda Herrera de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, FLACSO sede Ecuador.
Previo a la presentación, el Dr. Alberto Hernández H., Presidente de El Colef, externó un mensaje de felicitación al SEPMIG que cumple 20 años desde su creación. Recordó a los fundadores de este proyecto, el Dr. Jorge Santibañez y al Dr. Manuel Ángel Castillo, de El Colef y El Colegio de México respectivamente.
El presidente de El Colef también mencionó que hace 10 años se sumaron a este proyecto ECOSUR, El Colegio de Michoacán, el Departamento de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, Instituto Mora, CIESAS y la Sociedad Mexicana de Demografía, lo que permitió que este proyecto despegará aún más y se fortaleciera la labor que hasta el día de hoy realiza.
Aprovechó la ocasión para agradecer a la Mtra. Marisa Chong, Coordinadora Operativa del SEPMIG y a la Dra. Dolores Paris, Responsable por parte de El Colef, por su dedicación en beneficio del Seminario.
Posteriormente, tuvo lugar la conferencia de la Dra. Gioconda Herrera, durante la cual ofreció elementos para discutir las dimensiones de género y etnicidad en los procesos migratorios a partir del caso del retorno forzado de migrantes indígenas a sus comunidades de origen en Ecuador, además analizó el impacto de la deportación desde la perspectiva de familias en movilidad o familias transnacionales.
La académica señaló que los deportados suelen llegar con alteraciones en su salud mental, lo que provoca depresión, extrañamiento frente al entorno, culpabilización y una personalidad disminuida, lo que genera que los migrantes retornados tengan que hacer uso de calmantes o algún otro medicamento.
Puntualizó que la familia juega un rol muy importante en la reconstrucción del tejido social y emocional de las personas deportadas, sin embargo, remarcó que al existir diversas configuraciones familiares producto de la migración forzada o el retorno de los migrantes a sus comunidades de origen, este apoyo familiar suele no estar presente.
“Tenemos cuatro escenarios con la deportación. 1) Familias transnacionales en las que retorna la esposa y parte de los hijos con la deportación del padre. 2) Familias transnacionales con hijos en Ecuador y esposa que no retorna. 3) Familias transnacionales con esposa e hijo en Ecuador. 4) Familias con esposas e hijos que se quedan. Familias de varias nacionalidades. Aunque pueden haber más escenarios”, comentó la Dra. Herrera.
Para cerrar su participación, la experta comentó que las estructuras familiares son las que más se ven afectadas durante el proceso de deportación, ya que en ocasiones no es posible contar con los procesos de reunificación familiar y donde, al mismo tiempo, las experiencias de estos migrantes indígenas y rurales muestran que la presencia de redes familiares fuertes, transnacionales y locales, ejercen una suerte de control social que puede derivar en experiencias de integración que inhiban la exclusión social.
La Sesión inaugural SEPMIG “La vida después de la deportación: la experiencia del retorno de migrantes ecuatorianos en clave de género” fue transmitida vía Internet en el portal de El Colef, al cual puede acceder dando clic aquí.
