Con el objetivo de identificar los principales problemas como consecuencia del cambio climático en las comunidades aledañas a los Parques Nacionales Sierra de San Pedro Mártir y Constitución de 1857 localizados en Baja California, El Colegio de la Frontera Norte (El Colef), en colaboración con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), impartieron una serie de talleres dirigidos a pobladores de estas regiones para conocer sus Objetos de Conservación Socio-Ambiental (OCSA´S), así como para detectar elementos que permitan conocer el impacto del cambio climático en los poblados y las medidas de adaptación que deben adoptar ante el mismo.
Es por ello que el Taller Adaptación al Cambio Climático del Complejo de los Parques Nacionales Sierra de San Pedro Mártir y Constitución de 1857 tuvo como propósito conocer las estrategias y alternativas a futuro que dichos poblados podrían implementar con apoyos externos.
A lo largo de 6 talleres, el equipo de El Colef, liderado por el Dr. Hugo Riemann y la Dra. Gabriela Muñoz, ambos adscritos al Departamento de Estudios Urbanos y Medio Ambiente de esta institución, en conjunto con miembros del PNUD y CONANP, entablaron un diálogo con líderes y miembros de esas comunidades para abordar estrategias que los habitantes puedan seguir para afrontar el cambio climático a fin de mantener su forma de vida.
Como parte inicial de las sesiones, se invitó a los participantes a que identificaran su comunidad y listaran sus actividades económicas y productivas en un mapa desplegado para, posteriormente, abordar las diversas problemáticas surgidas.
Cabe destacar que los talleres se implementaron en las comunidades de Ex Hacienda Sinaloa, El Bramadero Sur, Ejido Tepi, Bramadero Norte, Ojos Negros – Real del Castillo y La Rumorosa, y en todas estas zonas los pobladores coincidieron en que los conflictos más comunes son la escasez de agua, la sequía, los incendios provocados, la generación de basura y la aparición de plagas, por mencionar algunos.
También comentaron que en el pasado se practicaba la cacería de conejo y codornices como una costumbre pero que desde hace algunosaños atrás, estos animales ya no se encuentran con tanta frecuencia.
Derivado de los problemas anteriores, los participantes indicaron que tomaron medidas para contrarrestar tales efectos con esfuerzos enfocados hacia trabajos de construcción y retención de agua, así como la limpieza y restauración de zonas naturales de captación de agua.
Otro hecho que se mencionó es que gran parte de los pozos se han secado con el paso del tiempo y es por ello que se tienen que hacer pozos cada vez más profundos.
En tanto, explicaron que existe una modificación en los periodos de lluvia debido a que antes se daban en noviembre (lluvias de invierno) y ahora se han “recorrido” hasta febrero o marzo (lo que ellos llaman lluvias de verano).
De igual manera, afirmaron que la gente se enferma más respecto a los cambios bruscos de clima (gripas, alergias, insolación) y que han tenido que recurrir a cambios en los horarios de trabajo para evitar el calor extremo en verano. Se dijo que para combatir enfermedades como gripa se recurre a la medicina tradicional y sueros al no existir centros de salud en su comunidad.
En lo que respecta a las sequías, los habitantes señalaron que ya no viven tanto de la ganadería, sino que se cambiaron a la siembra de palmilla; además, enfatizaron que “las sequías son propicias para los incendios en las pocas zonas donde aún se encuentra algo que se puede quemar, porque todo ya se ha quemado”.
Entre algunas de las estrategias que se recomendaron para enfrentar el cambio climático, se encuentra la construcción de represas, la instalación de tanques, retención de agua, construcción de abrevaderos y bebederos para fauna silvestre, limpieza y desazolve de aguajes, tecnificación en el campo, sistemas de riego eficiente, cambio de cultivo, comercialización temprana del ganado, cambio de giro en actividad económica (de ganadería a turismo), venta de animales que requieran menor gasto (cambio de tipo de ganado), reducción de áreas de cultivo y reducción en el número de cabezas de ganado.
Los resultados de los talleres comunitarios servirán como insumos para la elaboración de un Plan de Adaptación al Cambio Climático que será presentado al PNUD.
