El martes 18 de febrero de 2014 tuvo lugar el Seminario Cuerpo, salud, religión: Discusiones teórico metodológicas en torno al estudio del Embodiment, en las instalaciones de El Colegio de la Frontera Norte en Tijuana. Esta sesión constó de una conferencia impartida por la Mtra. Olga L. Olivas, candidata a doctora en Ciencias Sociales por el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores de Antropología Social (CIESAS Occidente).
Al aportar algunos avances de su investigación, contextualizó mencionando que su estudio se centra en la tradición de la danza azteca en la región de Baja California, México-Estados Unidos y Los Ángeles. Particularmente mencionó que grupos de danzantes abordados tienden a una recuperación de la cultura prehispánica azteca por medio de la recuperación de sus costumbres, en particular la danza. Especificó que hay dos vertientes principales de los danzantes aztecas en la actualidad, los concheros y a los que pertenece su objeto de estudio, a diferencia de los concheros su objeto de estudio no se centra en la danza para la adoración judeocristiana sino que hace lo posible por revindicar o rescatar la tradición prehispánica en su sentido más puro: regresar a un momento pre-conquista y retomar tradiciones que han sido olvidadas por muchos descendientes de las culturas prehispánicas. Ahondó en que recrear la identidad étnico-cultural a través de estas tradiciones se soporta sobre ejes de carácter político, religioso, nacional y corporal que tiene que ver con el contexto actual, como respuesta a situaciones específicas.
La investigadora se está basando en las teorías del embodiment para abordar estos grupos danzantes, viendo el proceso por el cual el individuo aprende con y a través del cuerpo por la imitación de un grupo y va generando identidad. Estos grupos generan una recreación del mundo a través de su cuerpo y en una comunicación activa con el mundo actual inciden en distintos aspectos de interés inmediato por medio de, por ejemplo, manifestaciones o protestas que tocan puntas o fibras clave del recreado ideológico que poseen.
Los danzantes deciden someter el cuerpo al ritual y lo exponen a situaciones físicas distintas a las comunes o diarias, a través de estas logran obtener una resignificación de su cuerpo como parte de una ancestralidad guerrera, transforman la experiencia corpórea en una experiencia y/o aprendizaje cultural. La investigadora ejemplifica el proceso del embodiment con un aspecto específico: Para los danzantes es muy importante la preparación corpórea previa al ritual de la danza el no tenerla incide en la experiencia ritual de todo el grupo.
En el caso particular de uno de los grupos, el que se encuentra en Los Ángeles, California, la construcción estética indígena tiene una importancia primaria, es vista por ellos como una manera de protesta o resistencia a la tendencia de imagen, entre esta construcción estética se encuentra la vestimenta, los tatuajes, etc. Utilizan esto para legitimarse como herederos de una cultura ancestral y renuevan anualmente su vestimenta como parte de su proceso cultural; importancia que en otros grupos puede encontrarse en prácticas paralelas como el ayuno, los temazcales o los retiros espirituales.
