Durante el año 2020, las remesas enviadas a México sumaron 40,606 millones de dólares, una cifra sin precedentes en los registros del Banco de México, lo que representó un 3.8% del PIB del país; así como un incremento anual del 11.44%, pese a los efectos que se sufrieron en diversos sectores de la economía a causa del Sars-CoV-2. En este sentido, Hacienda y Banxico presentaron una iniciativa para bancarizar las remesas de los connacionales en Estados Unidos.
El Dr. Alejandro Brugués, investigador del Departamento de Estudios Económicos de El Colegio de la Frontera Norte (El Colef), señala que el envío de las remesas se ha realizado, en su mayoría, a través de compañías que cobran diferentes tarifas de comisión, lo cual representa una disminución en el dinero que se recibe. De igual manera, agrega que hay personas que tienen la posibilidad de cruzar a México y de esta manera cambiar las divisas en centros cambiarios o en alguna entidad bancaria, donde la comisión es menor pero existe.
En este sentido, el Dr. Brugués puntualiza que la iniciativa de bancarizar las remesas puede tener efectos positivos, dado que para la compra-venta de divisas se otorgaría un precio preferencial y con un menor costo de comisión por transacción; lo cual también beneficiaría a la región fronteriza norte de México, dado que la compra de pesos sería mayor y dinamizará la circulación de divisas.
Sin embargo, puntualizó en que deben realizarse las estrategias e insumos que garanticen la seguridad de los envíos y de la población migrante en Estados Unidos que opte por este método de envío a través de las opciones que brinden Hacienda y el Banco de México.
La reflexión completa se encuentra disponible a través de: https://youtu.be/pSQmLMucj0I
