Ante la llegada de migrantes haitianos y africanos a la frontera norte de México, particularmente a la ciudad de Tijuana, Baja California, con el objetivo de solicitar asilo político a los Estados Unidos, la crisis de refugiados a nivel mundial ha marcado un precedente como nunca antes se había dado en esta región fronteriza.
Al respecto, la Dra. Alejandra Castañeda, Coordinadora del Observatorio de Legislación y Política Migratoria de El Colegio de la Frontera Norte, mencionó que será algo difícil que se les pueda autorizar la solicitud de asilo, ya que al ser una gran cantidad de migrantes, el impacto político de un volumen tan amplio no es favorable para los Estados Unidos.
De acuerdo al testimonio de “Franklin”, un haitiano que viaja con su esposa quien presenta un embarazo de 7 meses, para llegar a México tuvieron que recorrer entre 9 y 10 países por medio de aviones y autobuses.
“Fue muy difícil (llegar a Tijuana). Para llegar aquí recorrimos Brasil, Ecuador, Perú, Venezuela, Colombia, Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Honduras y Guatemala, y en cada uno de esos países hubo personas que nos trataron bien, pero también hubo otras que nos trataron muy mal”, mencionó.
Agregó que gastó aproximadamente 3 mil 500 dólares para poder llegar a México, pero que en algunos de los países señalados les robaron su dinero y en otros no tuvieron complicaciones de este tipo.
Explicó también que el propósito que busca con su ingreso a los Estados Unidos es el de tener una vida mejor: “Quiero trabajar para poder ayudar económicamente a mi familia”.
“Franklin” indicó que pasó poco tiempo trabajando en Brasil, donde tenía familia que ya lo esperaba y que lo apoyó algún tiempo, aunque menciona que él no podía apoyarlos de manera recíproca, y por eso decidió migrar al norte del continente.
Finalmente, “Franklin” hizo un llamado a los migrantes, donde enfatizó que espera que puedan encontrar un mejor entorno, y recalcó que cualquiera que sea su destino, reciban un trato digno.
